Entramos a la recta final de las campañas electorales y recientemente hemos visto cómo simpatizantes de los diferentes partidos políticos han protagonizado actos de violencia (física y verbal).
Ni modo compañeros de Yo soy 132, lo que le hicieron a Enrique Peña Nieto en la Ibero, fue una acción hostil, acosadora, que incluía violencia verbal al gritarle ¡asesino!.
Después ese mismo mes de mayo, en un mitín de Enrique Peña Nieto, vimos el "coraje político" que manifestantes, a favor y en contra del candidato del PRI, sacaron mutuamente en el estado de Veracruz:
Dos actos más nos hacen sentir que, a días de las votaciones, los ánimos de los partidistas se calientan.
1. El diputado Gerardo Fernández Noroña fue invitado a dar una conferencia en Mazatlan, ahí una mujer le lanzó dos huevos provocando el enojo de los asistentes:
2. En la ciudad de México supuestos militantes del PRI golpearon a perredistas en el andén del metro Revolución (lugar que hace un poco irónico el acto).
La imagen nos muestra el riesgo que la trifulca provocó, ya que la pelea se da muy cerca de las vías del metro.
Es verdad, hay mucho odio político, mucho resentimiento social, mucha sed de justicia y hambre de venganza economíca.
La gente está harta de la gente, de sus gobiernos y de su realidad social.
Esperemos equivocarnos y que el domingo 1 de julio del 2012 México viva unas elecciones con paz, porque en el aire de este país ya empezamos a respirar una sensación de violencia.
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