En el año 2015 al cantante Ari Boroboy se le ocurrió juntar al grupo musical Jeans quienes fueran un fenómeno de los años 90. Boroboy se dio cuenta que la nostalgia por los grupos Pop dejaba mucho dinero. Y es que, su reencuentro con OV7 salió más que redituable, tanto que ya no se volvieron a separar quedando solo cinco integrantes.
Después de negociar los derechos del nombre (“Jeans”) con el ex representante y creador del grupo, Alejandro Sirvent, papá de Patricia Sirvent, Arí logró volver a juntar a Karla Díaz, Angie Taddei, Melissa López y Regina Murguía.
Tengo que reconocer que no soy experto y fanático de la agrupación, incluso tuve que googlear a las dos integrantes que hicieron su carrera en TV Azteca; Angie y Melisa bien se sabe que hicieron programas en Telehit y todavía las tenemos en el imaginario colectivo.
Recordemos que Karla intentó “hacer carrera” en la televisora del Ajusco entrando a un reality llamado “La Isla” y Regina estuvo mucho tiempo en la conducción de programas dominicales que ni su abuelita veía.
Estas dos exintegrantes de “Jeans” solo fueron a dar lástimas; porque las pobres de conductoras y actrices no tienen nada (de talento). Les dieron puros mugreríos de programas.
Este reencuentro, quizás como todos , resultó una bomba. El haberlas hecho volver a cantar; “Pepe”, “Dime que me amas”, “Enferma de Amor”, fue un trancazo.
Jeans nunca estuvieron olvidadas. En los lugares gays sonaban y sonaban (léase Cavaretito VIP, Cavaretito Safari, Cavaretito Fusion); “La comunidad” LGBTTTI las escuchaban y además imitaban sus coreografías. (1)
De hecho “en vida” el grupo Jeans visitó la Zona Rosa “N”cantidad de veces, algo que a los padres de la cantante Litzy no les gustó; pues argumentaban que su hija estaba muy chica para pisar tierras homosexuales.
Así que Jeans desde su inicio hasta después de haberse desintegrado fueron apropiadas por la comunidad de jotitos y jotitas (Vicente Fox dixit)
Ya en serio, ellas se ven mejor que nunca, tienen un cuerpo que ni mandado a hacer, y si se lo hicieron en cirugía pues mis respetos. Cantan mejor que nunca, y ahora sin Patricia Sirvent, se lucen más.
También brillaron en este resurgimiento Dulce María, Litzy y los OV7.
Como nunca dejaron de sonar en los bares gays de Zona Rosa, el reencuentro sirvió para refrescar estos lugares y las nuevas versiones suenan y suenan.
Hay mucho dinero invertido; vestuario, sonido, imagen. Pero las niñas también evolucionaron, musicalmente hablando se notan más maduras, con más dominio del escenario. Se les nota seguridad, gallardía al cantar.
Con las coreografías, aunque siguen siendo las mismas, hacen brillar a las chavitas y hasta tienen un toque más femenino, sin llegar a hacer infantil o ridículo.
Hoy, las Jeans, quizás hasta ganan más dinero de lo que ganaban cuando su manager les arreglaba contratos y presentaciones, de hecho jamás, ellas en su carrera, pisaron el escenario del Auditorio Nacional. En el 2016 lo hicieron por primera vez, triunfando al mismo tiempo, en tierras heterosexuales.
(1) Pongo la palabra “Comunidad” entre comillas porque la verdad es que dicha comunidad no existe, como tampoco existe "la Comunidad Heterosexual".
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