martes, 26 de diciembre de 2017

¿La Navidad es una festividad 100% católica? Por Manuel Adame


Esta solemnidad, que conmemora el nacimiento de Jesucristo en Belén, es un día festivo en muchos países celebrado por millones de personas en todo el mundo,  y lo increíble, es que también se unen a ésta un gran número de no cristianos.

Tan popular y esparcida por todo el mundo; la palabra "Navidad" viene del latín: nativitas, ‘nacimiento’, "Natividad".

En sí, no se sabe el día exacto cuando nació Jesús, no se tiene el dato científico que lo compruebe.

Algunos expertos han intentado calcular la fecha del nacimiento de Jesús tomando la Biblia como fuente, pues en el libro de Lucas​ se afirma que en el momento de la concepción de Juan el Bautista, Zacarías su padre, sacerdote del grupo de Abdías, oficiaba en el Templo de Jerusalén y, según Lucas, Jesús nació aproximadamente seis meses después de Juan.

En Crónicas se indica que había 24 grupos de sacerdotes que servían por turnos en el templo y al grupo de Abdías le correspondía el octavo turno.

Contando los turnos desde el comienzo del año, al grupo de Abdías le correspondió servir a comienzos de junio (del 8 al 14 del tercer mes del calendario lunar hebreo).

Siguiendo esta hipótesis, si los embarazos de Isabel y María fueron normales, Juan nació en marzo y Jesús en septiembre. Esta fecha sería compatible con la indicación de la Biblia,​ según la cual la noche del nacimiento de Jesús los pastores cuidaban los rebaños al aire libre, lo cual difícilmente podría haber ocurrido en diciembre. (1)

Cualquier cálculo sobre el nacimiento de Jesús debe estar ajustado a esta fuente primaria, por lo que la fecha correcta debe estar entre septiembre y octubre, principios del otoño.

Además, debe tomarse en cuenta el censo ordenado por César al tiempo del nacimiento del Hijo de Dios, lo cual obviamente no pudo haber sido en diciembre, época de intenso frío en Jerusalén, la razón es que el pueblo judío era proclive a la rebelión y hubiera sido imprudente ordenar un censo en esa época del año.

Fue el papa Gregorio XIII quien hizo la la reforma al calendario juliano para pasar al calendario conocido como gregoriano, nombre derivado de su reformador.

Otro elemento a considerar es que desde el propio Vaticano se realizó un Calendario Litúrgico o Año Litúrgico:

"La primera fiesta que se celebró fue la del Domingo. Después, con la Pascua como única fiesta anual, se decidió festejar el nacimiento de Cristo en el solsticio de invierno, día en que numerosos pueblos paganos celebraban el renacimiento del sol. En lugar de festejar al Sol de Justicia, se festeja al Dios Creador. 

Así, poco a poco, se fue conformando el Año litúrgico con una serie de fiestas solemnes, alegres, de reflexión o de penitencia". (2)

La Iglesia Católica también creyó que "la noche más obscura del año" sería La Noche Buena donde Cristo Redentor traería la luz al mundo.


Entonces, comprobado; fue la Iglesia Católica por medio del Papa Gregorio XIII quien le puso día a la celebración del nacimiento de Cristo.

En otras Iglesias ortodoxas, como la Iglesia Ortodoxa Rusa o la Iglesia Ortodoxa de Jerusalén, que no aceptaron la reforma del Papa tomaron como fecha el 7 de enero.

Durante la Reforma protestante, la celebración del nacimiento de Cristo fue prohibida por algunas Iglesias protestantes, llamándola "Trampas de los papistas" y hasta "Garras de la bestia", debido a su relación con el catolicismo y el paganismo antiguo.

En la época colonial de los Estados Unidos, los puritanos de Nueva Inglaterra rechazaron la Navidad, y su celebración fue declarada ilegal en Boston de 1659 a 1681

Los mormones o la llamada Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días,quienes no se consideran una Iglesia protestante ni reformada, sino una Iglesia restaurada, se unen al mundo en la celebración navideña tradicional pero manifestaron lo siguiente:

"Nosotros creemos que el 6 de abril es el cumpleaños de Jesucristo, de conformidad con lo indicado en la revelación citada en Doctrina y Convenios. 

Admitimos que nuestra aceptación se basa en la fe en las revelaciones modernas, y de ninguna manera se presenta como el resultado de una investigación o análisis cronológicos. 

Nosotros creemos que Jesucristo nació en Belén de Judea, el 6 de abril del año 1 antes de J.C" (3)

En otras confesiones cristianas La Navidad es celebrada por la mayoría de los cristianos, aunque algunos como los Testigos de Jehová y algunas denominaciones protestantes consideran que, al no indicar en la Biblia la fecha del nacimiento de Jesucristo ni ordenar celebrarla, no hay razón para celebrar o crear una fiesta por ese motivo.

Yo conozco a un amigo que su mamá se define como testigo de jehová,  y NO LO DEJABA CELEBRAR LA NAVIDAD, TAMPOCO "LE DABA REYES MAGOS"; hoy es un católico muy resentido con esa religión, la investigó, se unió a una fundación que denuncia ante las autoridades los abusos de los Testigos a la sociedad y que desenmascara sus raras ideas y la manipulación directa a las personas más vulnerables como son los ignorantes.

Volviendo al tema, muchos protestantes creen que la Navidad debe ser motivo de disputas porque no quieren seguir las viejas tradiciones de la Iglesia católica, sin embargo no les queda de otra mas que subirse al tren.


Otro interesnte caso es el de Japón y China, que la mayoría población de esos países se define a sí misma como budistas. Pero el meollo del asunto es el económico.

Aunque celebrar la Navidad no forma parte de la tradición cultural oriental; La ciudad china Yiwu vive durante todo el año de la producción de artículos navideños. Esta producción representa un 60% del consumo mundial. La importación de productos desde Asia se acrecienta con motivo de la campaña de Navidad. Entre los productos más demandados destacan adornos y juguetes.

Entonces los ateos, los protestantes y hasta los judíos no pueden escaparse de la inercia de festejar la Navidad 

(1) Wikipedia 
https://es.wikipedia.org/wiki/Navidad

(2) Catholic.net
http://es.catholic.net/op/articulos/18025/cat/719/el-ano-liturgico-origen-y-significado.html

(3) Fuente: Jesús el Cristo. Por James E. Talmage. Capítulo 9, páginas 108-109.

domingo, 10 de diciembre de 2017

CINCO CLICHÉS QUE ODIO DE LA LOCUCIÓN Por Gianfranco Fuscaldo Albino


Siempre que escucho en la radio o la televisión decir ciertas frases hechas me pregunto si los seres humanos en verdad tenemos tanta creatividad como creemos, o somos un cúmulo de vivencias, de estímulos que copiamos sin darnos cuenta. 

Es un hecho que un individuo asimila la lengua, las frases, el lenguaje y las actitudes de los que están a su alrededor. 

El ser humano es el único animal que jamás deja de absorber conocimientos. En los oficios y sobre todo en el arte, vemos que los individuos desarrollan capacidades y talentos a partir de que ya conocieron y admiraron los de otros.

Por ejemplo: un escritor tiene sus ídolos, y de los ídolos uno aprende, uno intenta parecerse a la persona que admira y “crear” nuevas cosas.

Así un pintor, un escultor, un artista, un escritor, un cantante etc. “va echando en el costal” la influencia de sus maestros, de sus ídolos y de los profesionales que fueron sus predecesores.

Mario Vargas Llosa leyó a un Miguel de Cervantes y un Cervantes a su vez leyó a un Aristóteles. Por eso, para nada es extraño que hoy, con las nuevas tecnologías de la información aún estemos repitiendo viejos patrones. 

Antes de esas “nuevas tecnologías” estaban en auge la radio y la televisión, ahora el boom es la plataforma de videos You Tube; A ya casi dos décadas de iniciado el siglo XXI escuchamos que las nuevas generaciones de locutores, periodistas y hasta los llamados influencers y you-tubers siguen colocando en su lenguaje las mismas “frases ya hechas”.

Aquí va la lista:

1.- “Ombligo de la semana”
2.- “Por fin es viernes”
3.- “Jueves: viernes chiquito”
4.- “Es lunes, buen inicio de semana”
5.- “Déjame les platico”, “déjenme contarles que…”

Desde 1982 que “tengo uso de razón” he escuchado decir a los grandes profesionales del micrófono estas “palabritas”, que hoy, 2017, ya chocan, ya cansan, ya están muy usadas, y denotan que no hay mucha creatividad y originalidad de los que trabajan del otro lado del micrófono.

Hagan el ejercicio de monitoreo de medios, escuchen cualquier programa de radio, ya sea local o nacional, enciendan la computadora y también comparen a los nuevos influyentes del ciberespacio; es quizás porque los millennials crecieron con las frases tipo Raúl Velasco:

“Aún hay más”

Unos han intentado inmortalizar algunas frases, 
pero no´más dan pura vergüenza.

¿Qué me dicen de los que ya quieren imponer su propio estilo al hablar?

¿Qué opinan de los que han querido pero su impacto ha sido mediocremente?

Les doy algunos nombres: 

Maggie Hegyi movía su brazo al despedir cada nota en el desaparecido programa de televisión "Con Sello de Mujer".

Gustavo Adolfo Infante con su mamón estilo al hablar.

Rafael Mercadante, con su “ahoritita regresamos”

Fabiruchis, con su palabra “zafarrancho” 

Javier Alatorre, con su “esta noche en Hechos”

Jaime Mausán, con su “nadie hace nada” 

Y Álvaro Cueva  con su “chéquelo”.

No nos disgusta que los señores del micrófono hagan el intento por parecer originales, pero hay algo cierto; menos es más, y la simpleza también es bien recibida.

¿Por qué imponer una frase o tonadita si la audiencia no es tonta y sabe que estamos ejerciendo un viejo truco de la mercadotecnia?

Solo mentes inteligentes pudieron imponer su estilo:

Ejemplo de ello, Paco Malgesto, y en estas épocas nos guste o no un Toño Esquinca o Mariano Osorio.

Aunque los odien, los televisos hicieron un estilo propio: 

Joaquín López Dóriga, Óscar Cadena, Nino Canún, Jacobo Zabludovsky, Guillermo Ochoa padre, Adela Micha y el controvertido Raúl Velasco.

Pero ¿qué se necesita para ser un excelente comunicador?

Es que se necesita talento, horas de lectura, inteligencia, experiencia en los medios, humildad y haber ido a la escuela para no caer en los lugares comunes. No se vale en estas épocas escuchar las mismas tonterías que se daban en la radio comercial de 1988.

Si tienen una frase que en verdad les guste o alguna que no, háganla llegar por medio de los comentarios.

Podéis ir en Paz; este escrito ha terminado