Proverbio Mexiquense
Teníamos pensado escribir sobre la aprensión de Jorge Hank Rhon, pero pensándolo bien, no tiene caso gastar tinta en la detención a destiempo de un presunto inocente digno hijo y sucesor del Profesor Carlos Hank González.
Mejor lo haremos por segunda y última vez de Javier Sicilia que de poeta desconocido, y colaborador de la revista Proceso (¿Tú le crees a Proceso? ¡Yo tampoco!) pasó a ser una especie de héroe local.
Por supuesto a nadie (gente normal, común, o decente), le deseamos la doble pena que sufrió:
La muerte por asesinato de su hijo
Pero esta tragedia (agravada porque al parecer fue un acto del llamado crimen organizado):
¿Lo convierte en automático en el nuevo redentor de la Sociedad Mexicana como:
Madero, Belisario Domínguez o mi General Felipe Angeles?
La respuesta es ¡No!
Sí antes del incidente, Sicilia hubiera sido un luchador social y por esa razón mataran a su hijo; su:
Causa, marcha y caravanas por la paz estarían justificadas y sería un interlocutor válido entre la Sociedad Civil y el Presidente de la República.
Pero el ser una de las miles desafortunadas víctimas de la guerra perdida contra el narco, no lo hacen un líder social o popular y sólo puede ser el vocero de su familia y tal vez de su comunidad. También habría que recordarle que soñadores como los que él quiere imitar tipo:
Martin Luther King y John Lennon. Están muertos y enterrados
Así es que Con todo respeto y con la pena señor Sicilia, pero no lo queremos como nuestro:
Mahatma Gandhi a la mexicana
(7/VI/2011) (CARLOS)
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