¿Claudia Sheinbaum sufrirá el síndrome de la banda presidencial? Por Mayra Villanueva

Dicen las malas lenguas que, en la llamada época del Maximato en México, tres fueron los títeres que puso el expresidente Plutarco Elías Calles: 

Emilio Portes Gil (1), Pascual Ortiz Rubio (2) y Abelardo L. Rodríguez (3). 

Todos los historiadores coinciden de que eran simples marionetas de don Plutarco porque sus decisiones no eran propias y respondían al modo en que Calles manejaba los hilos de la política.

Pero hubo un cuarto que no estuvo dispuesto a continuar con esa farsa:

En 1934, Lázaro Cárdenas del Río fue elegido presidente Constitucional de México y al ponerse la banda presidencial mandó a la chingada a Plutarco Elías Calles, y con él a una etapa vergonzosa del país que ha sido casi borrada de los libros de texto de la SEP. (4)

Narran los cronistas de México que, cuando los mandatarios de se ponían por primera vez la banda presidencial, y se sentaban en la silla, EL PODER se posicionaba de ellos como un espíritu. 

¡Hasta el caudillo de México, Emiliano Zapata, que estuvo en el trono mexicano unos cuantos minutos dicen que se mareó con la silla espiritista!

Tomen nota. Apunten este post. Guarden esto para el año 2026:

Porque creemos que cuando Claudia Sheinbaum cuando AMLO le levante la mano, literalmente ella mandará a su antecesor a “La Chingada”.

Quizás no de inmediato, tal vez los primeros meses, pero cuando la nueva presidenta le tome la llamada al ex presidente (que se encontrará ya instalado en su rancho); lo hará por unos meses.

Después, puede que lleguen los dos años y Claudia no pueda contestarle el teléfono al señor; quizás Claudia Sheinbaum aplique la de: 

“Dile al señor que no me encuentro disponible”, “dile al señor que estoy ocupada”, “díganle al señor que en un momento lo llamo”, hasta llegar al:

“Díganle al señor que no me es posible contestar la llamada”. Y ¡zas!, López Obrador va a ser mandado de golpe a la esquina por su discípula.

Pues los que saben de Historia dicen que el poder se siente, te domina, te controla. 

Dicen “los que saben” que cuando se adquiere poder los mandatarios se ciegan cabrón. 

“El poder marea”, aseguran algunos. 

Ese poder nos hace sordos, soberbios y locos.

Por eso, nosotros dudamos que a Sheinbaum no le vaya a ocurrir el síndrome de silla presidencial y, por supuesto que, ya no se va a dejar mandar por su macho-patrón que con una llamada telefónica intentará manipularla. 

Sheinbaum se va a mirar al espejo con la banda presidencial puesta, y “va a creérsela”; pues realmente ella será la primera mandataria de México, la primera mujer en ocupar el cargo. Va a enloquecer.

Al hacerlo, AMLO no podrá ya controlarla, Claudia aprovechará el distanciamiento geográfico primero, y el de lealtad después, para dejar en su rancho a don Andrés.

¿Una apuesta? Unos tacos de pastor a que sí.

(1) Emilio Portes Gil gobernó como presidente interino (1928-1930) tras el asesinato de Álvaro Obregón.

(2) Pascual Ortiz Rubio fue presidente (1930-1932) tras las elecciones convocadas por Portes Gil
(3) Abelardo L. Rodríguez fue presidente sustituto tras la renuncia de Ortiz Rubio. (1932-1934)
(4) Plutarco Elías Calles fue presidente de México de 1924 a 1928. Su gobierno se caracterizó por los conflictos entre la Iglesia Católica y el Estado con el inicio de la Guerra Cristera en 1926.