EL ABOGADO DEL DIABLO : VENEZUELA NECESITA UN EXORCISMO Por Gianfranco Fuscaldo Albino

Se nota que Hugo Chávez Frías hizo brujerías por Venezuela, se nota la falta de Dios en esa nación.

En el libro: “Los Brujos de Chávez”, del autor David Placer, se informa que Hugo Chávez Frías acudió a la Santería cubana para perpetuarse en el poder en Venezuela. Consagró a su país a los más oscuros espíritus y exhumó los restos de Simón Bolívar para hacer sus brujerías que, según Chávez, le darían toda la legitimidad y protección política ante sus enemigos.

(1)

Documentado mil veces, toda la nación venezolana sabe que “su comandante” fue un hombre enfermo de poder. Utilizó muy bien el odio hacia la cultura estadounidense, se apropió del discurso anti-yankee que varios autores latinoamericanos como Eduardo Galeano ya venían manejando durante toda la midad del Siglo XX.

Chávez usó a los pobres para ganar afinidad en su país; y lo hizo muy bien, supo engañar a más de un intelectual de izquierda.

Pero todo cae por su propio peso, ni los hechizos santeros pudieron librarlo de la muerte. Porque Dios da y quita la vida.

Chávez pasó al más allá dejando a su pelele en el poder, a una nación dividida; con devaluación, con odio a sus gobernantes; un caos que ni el Papa Francisco, la comunidad internacional y la ONU han podido solucionar.

Venezuela tiene hambre, se convirtió en una Cuba II, con la diferencia que en la isla sí hay medicamentos.

Venezuela es engañada por milésima y milésima vez.

Con el viejo discurso de “que los gringos nos quieren quitar la patria” Nicolás Maduro Moros, aprendiz de Hugo Chávez, ya está en la frontera de la cordura y no oye ni quiere oír a la comunidad internacional.

A casi dos meses que se “celebren” elecciones en Venezuela, el resultado ya lo sabemos todos; Nicolás Maduro tendrá de nuevo el poder ante la indignación, incredulidad y suspicacia de las miradas internacionales.

Por más documentado que pueda estar la crisis en el país sudamericano, la manipulación ideológica que el gobierno venezolano da dentro es para ganarse un premio Nobel. Las "vueltas argumentativas" que le da Maduro a la Comunidad Internacional son de risa loca.

Una Venezuela con deuda externa, devaluación, despempleo y con alza en homicidios es lo que está simpre negando Maduro:

(2)

La Iglesia Católica, por medio del Episcopado Venezolano ha intentado alzar la voz, como ellos son de los pocos que pueden levantarse en contra del gobierno de Maduro sin recibir la cárcel como consecuencia; los obispos en Venezuela intentan desesperadamente que los votos del pueblo no vuelvan a ser burlados por el bailarín de su presidente.

Venezuela, se nota que tiene el chamuco por dentro, se nota que la maldición le llegó a ella, que su pueblo está pagando las consecuencias con hambre, miedo, llanto, odio, peleas, desesperanza y guerra interna.

Venezuela es una vergüenza para los que en verdad creyeron que el comunismo sería la puerta a la bonanza. Venezuela es hoy un país herido, dividido, maltratado y engañado por sus propias autoridades.

Solo un verdadero exorcismo, y no la Revolución Bolivariana, librará a Venezuela del caos en la que está sumergida.